Eric Fischl

Eric Fischl se forma inicialmente en Phoenix, Arizona, y más adelante en el Institute of the Arts en California, uno de los centros más vanguardistas del momento, donde en esa época se ponía especial énfasis en restarle importancia a las técnicas pictóricas y al conocimiento de la historia de la pintura. Su paso por el centro le convirtió en una persona de actitud inconformista e irreverente; y al ser consciente de que no dominaba los rudimentos básicos de la pintura, fomentó en él un deseo de experimentar y de curiosear constantemente, le hizo acercarse a otros medios expresivos como la escultura, el dibujo o el grabado.  

Las obras iniciales de Eric Fischl, tenían mucha fuerza temática, pero tenían una estética kitsch. El mismo autor se ha descrito como un pintor de los suburbios, un tema que no ha estado considerado como apropiado antes de su generación. 

En cuanto a la obra de Fischl, a partir de 1976 deja de lado la abstracción y el arte minimalista, para empezar a introducir elementos figurativos a sus cuadros ya que sentía la necesidad de expresar sus sentimientos de una forma directa y descarnada, que no podía hacer a través de la abstracción o minimalismo. Su pintura realista de fuerte carácter expresivo, con influencia de expresionistas como Max Beckmann, Lucian Freud o pintores de la tradición naturalista norteamericana como Winslow Homer, Edward Hopper o John Singer Sargent, le sirvieron de terapia para tratar sus traumas y desmontar la hipocresía que veía en la sociedad. El objeto de estudio en las obras de Eric Fischl, son el ser humano, su cuerpo y el desnudo. Se centra en la sexualidad, representando escenas escabrosas de alto contenido sexual con cuerpos desnudos en actitudes eróticas con cierto aire angustioso, enigmático u opresivo. 

Eric Fischl golpea en el subconsciente del espectador teniendo como intención principal que se sienta incómodo, como un sórdido "voyeur" que contempla intimidades ajenas. La manera de acentuar la expresividad de sus personajes es dándole énfasis con colores apagados de su paleta, utilizando contrastes descarados y violentos de luces. Fischl desprecia las composiciones equilibradas o previsibles y no lo interesan los paisajes ni los fondes. 

Estas pinturas no sólo lo catalogaron de pintor obsceno e incómodo sino que también le dieron popularidad; de hecho, hoy en día es un pintor y escultor consagrado en el mercado del arte americano e internacional. Su éxito, logros y premios han hecho del Fischl uno de los pintores figurativos más influyentes e importantes de finales del siglo XX y principios del siglo XXI. 

Eric Fischl es miembro de la Academia Americana de las Artes y las Letras y de la Academia Americana de las Artes y las Ciencias. Su obra está representada en numerosos museos de todo el mundo, en exposiciones colectivas e incluso en colecciones privadas y corporativas de prestigio. Actualmente vive y trabaja en Sag Harbour, en Nueva York.