Luis Feduchi

Luis Martínez Feduchi Ruiz nació en 1901 en Madrid, en el seno de una familia de arquitectos. Siguiendo la tradición familiar se inscribió en la Escuela de Arquitectura de Madrid, y tras licenciarse viajó por Europa para conocer las últimas tendencias arquitectónicas, desde el Expresionismo al Racionalismo o al Art Déco. Ya en su juventud su tío, el arquitecto Luis Cabello Lapiedra, le inculcó el respeto por los monumentos y el gusto por la arquitectura popular tradicional. Así se explica probablemente que en su carrera profesional realizara numerosos proyectos de restauración. De hecho, una de sus primeras obras fue de hecho la restauración y decoración del Castillo de Oropesa, para convertirlo en el primer Parador de Turismo de España (1932), así como dos viviendas unifamiliares, en el Plantío (1929) y en la calle Oquendo de Madrid (1932). Durante los años 30, Feduchi fue uno de los arquitectos que participó en la construcción de los edificios que se levantaron en la Gran Vía de Madrid, junto a los más prestigiosos arquitectos del país: Castro Fernández Shaw, Luis Gutiérrez Soto, Modesto López de Otero, Pedro Muguruza, Joaquín y Julián Otamendi, Antonio Palacios y Secundino Zuazo. El proyecto fue aprobado en 1901, por una cifra entonces considerada escandalosa, que rozaba los 29 millones de pesetas. Aunque tenían que concluir en 1918, las obras se prolongaron hasta 1929. Junto a Vicente Eced, con quien colaboró a menudo, amigo y vecino de infancia y compañero de promoción, llevó a cabo su obra más conocida, el edificio Carrión (cine Capitol), en la Gran Vía (1933). Feduchi no separó sus proyectos arquitectónicos de su faceta como diseñador industrial, en particular de muebles. A la vuelta de sus inspiradores viajes por Europa, llevó a cabo diversas iniciativas, junto a Javier Feduchi, Javier Carvajal y Carlos de Miguel, para desarrollar el diseño industrial en España. Encontraron sin embargo grandes dificultades: la falta de un tejido industrial y el poco riesgo de la clase empresarial no favorecía la demanda de nuevos proyectos. Para dos de sus mayores obras, el edificio Capitol (1931-1933) y el Hotel Castellana Hilton (1953) de Madrid, Feduchi diseñó y produjo extensas series de mobiliario, incluso las cuberterías o las neveras y electrodomésticos. Para el edificio Carrión trabajó con la empresa de muebles ROLACO-MAC, en 1934 el edificio fue premiado con la Medalla de Segunda Clase en la Exposición Nacional de las Artes. Dos años más tarde, fundó con su amigo Luis Santamaría la empresa Sociedad Santamaría y Feduchi de Muebles y Decoración. Al mismo tiempo, Feduchi trabajó como arquitecto conservador del Patrimonio de la República.Tras la Guerra Civil, Feduchi tuvo mejor suerte que algunos de sus colegas (como Vicente Eced) y no fue encarcelado ni inhabilitado. Durante los primeros años de posguerra hizo decoraciones para la cartelera de los cines, y accedió como profesor de Escenografía y Decoración en el Instituto de Investigaciones de Experiencias Cinematográficas entre 1946 y 1955. También pudo llevar a cabo obras para el Instituto de Cultura Hispánica y para el Ministerio de Exteriores, así como varios privados, como el Museo de América (1942-1954), la Escuela Diplomática (1948-1954) o el Hotel Castellana (1947-1953). En estos proyectos, Feduchi hizo un retorno a sus orígenes modernistas y a la arquitectura tradicional española e hispanoamericana. También realizó proyectos fuera de Madrid y en el extranjero, como en Almería, Huesca, Zaragoza, Ferrol, Vigo, Cáceres, o Tánger. En el ámbito del diseño industrial, con Carlos de Miguel y Javier Carvajal, Feduchi fundó el SEDI, la Sociedad de Estudios de Diseño Industrial (1957).Su actividad profesional como arquitecto y diseñador se complementó con la publicación de diversos estudios sobre el mueble español, la artesanía y la arquitectura popular, así como del libro Historia del mueble, de 1946.