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Josep Mª Julià

Barcelona, 1954

Nacido en 1954, Josep Maria Julià se licenció como Arquitecto Superior por la ETSAB (Escola Tècnica Superior d´Arquitectura de Barcelona, adscrita a la UPC) en 1982. Julià es autor de numerosos proyectos urbanos, de edificación, restauración y diseño desarrollados en el área metropolitana de Barcelona.

Su primer proyecto, la urbanización de la plaza Sòller, una de las más grandes de Barcelona, fue una de las primeras intervenciones urbanas del ayuntamiento de la recién estrenada democracia: combina una mitad de zona ajardinada, con otra de plaza dura, el estilo urbano...

Nacido en 1954, Josep Maria Julià se licenció como Arquitecto Superior por la ETSAB (Escola Tècnica Superior d´Arquitectura de Barcelona, adscrita a la UPC) en 1982. Julià es autor de numerosos proyectos urbanos, de edificación, restauración y diseño desarrollados en el área metropolitana de Barcelona.

Su primer proyecto, la urbanización de la plaza Sòller, una de las más grandes de Barcelona, fue una de las primeras intervenciones urbanas del ayuntamiento de la recién estrenada democracia: combina una mitad de zona ajardinada, con otra de plaza dura, el estilo urbano que caracterizó a la década de los 80.

Josep M. Julià es responsable de las remodelaciones de la Via Júlia (con Bernardo de Sola, 1986) y de la Rambla de Sabadell (con Olga Tarrasó, 1991), y de la ejecución del parque de la Torrassa en l´Hospitalet de Llobregat (con A. Pericó, 1999). Julià también ha sido el responsable de la restauración del subsuelo de la fuente Telefónica” de la plaza Cataluña de Barcelona (1998), de la escuela y biblioteca de barrio El Vapor Vell de Sants (2000), y de la antigua fábrica Can Surís de Cornellà de Llobregat (2001).

En 1989, recibió el encargo de restaurar el Reial Monestir de Santa Maria de Pedralbes. Gracias a los privilegios de los que dotó la reina Elisenda de Montcada al monasterio en el siglo XIV, el monasterio quedó bajo la protección directa de la ciudad. En 1991 se declaró Monumento Histórico Artístico, y una parte pasó a formar parte del Museo de Historia de Barcelona. Se llegó al acuerdo de que la comunidad religiosa cedía en arrendamiento parte del monasterio como recinto museístico, a cambio de su restauración y conservación. En 1989, Josep M. Julià y Pere López Iñigo iniciaron la remodelación del ala del antiguo dormitorio de las monjas; en 1995, la iluminación de la iglesia; en 2000, la consolidación estructural del ala de la enfermería, y en 2002, la rehabilitación de la cubierta y restauración integral de los vitrales. El proyecto recibió el Premi Ciutat de Barcelona en 1991. Actualmente parte del recinto es la sede de la colección Thyssen-Bornemisza.

En paralelo a su actividad arquitectónica, Josep M. Julià es autor de diversos elementos urbanos y de iluminación. El primero, la columna de iluminación Nikolson, diseñada en 1983 junto a Bernardo de Sola y Pedro Barragán, es desde entonces una de las más universales, y un clásico del mobiliario urbano. Su aplique Macaya, en colaboración con Mª Luisa Aguado, recibió en 1990 el premio Delta de Plata ADI-FAD de diseño industrial. En 1985 diseña con Bernardo de Sola la pilona Julieta, una reja abatible para recogida de agua y el alcorque Via Júlia. Junto a Olga Tarrasó creó en 1991 la columna de iluminación Elephans y el banco Sabadell. Son suyos también diseños como el de la lámpara de techo Pedralbes (1995), la lámpara de pared Cor Baix (1996), la columna de iluminación Torrassa (1998), el mobiliario Damm para la empresa cervecera (2002) y las mesas de despacho Taulagran (2002).