The Aura in the Age of Digital Materiality

Una colección de ensayos para la fundación Factum
Las tecnologías digitales están cambiando profundamente la forma en la que nos relacionamos con el arte, desde la forma en la accedemos a objetos y los exponemos, hasta cómo lo preservamos, restauramos, archivamos e incluso poseemos.
El Aura en la edad de la materialidad digital explora temas que emergen del potencial sin precedentes de la convergencia entre tecnología digital y herencia cultural en una época en la que nos vemos fundamentalmente forzados a replantearnos que es lo que valoramos, cómo y por qué. Reúne proyectos recientes de Factum y una fantástica y diversa colección de ensayos, la mayoría escritos especialmente para este libro, por colaboradores y amigos. La brutal diferencia entre sus orígenes y disciplinas, ilustra la importancia de este tema y su gran rango de relevancia. Los colaboradores incluyen Hartwig Fischer, Director del Museo Británico, Mari Lending, autora de Monumentos de yeso: Arquitectura y el poder de la reproducción; Nadja Aksamija, Profesora del Renacimiento italiano y de arte barroco y arquitectura en la universidad de Wesleyan; el egiptólogo Nicholas Reeves; el ganador del premio Pullitzer Richard Powers, Shirley Diukurna Krenak, activista indígena del Alto Xingu; los filósofos Bruno Latour, Brian Cantwell Smith y Alva Noë, Simon Schaffer, Profesor de Historia y Filosofía de la Ciencia en la Universidad de Cambridge; la arquitecta Charlotte Skene Catling; Jerry Brotton, especialista en cartografía y el Renacimiento; y Chiara Cadarin, Directora del Musei Civici di Bassano del Grappa.
Nuestro mundo se encuentra en una encrucijada. Las personas están en riesgo y nuestra herencia cultural se ve amenazada por la falta de recursos, desastres naturales, el cambio climático, el terrorismo, el turismo en masa y la guerra. No ha habido otro período tan crítico que requiera el uso de la tecnología para la preservación. Si se hubieran utilizado estos métodos de alta resolución para grabar Aleppo antes de su destrucción, el tamaño de Nimrud o los Buddhas de Bamyan antes de que los bombardearan, o Notre Dame antes de que se quemara, estos ejemplos de la creatividad humana no se habrían perdido completamente para siempre. Cuando Dresden fue bombardeado, solo quedaron las fotografías y los recuerdos. En el siglo XXI, tenemos los medios tecnológicos suficientes. Debemos actuar urgentemente para grabar y preservar nuestra herencia cultural para las generaciones futuras. Este libro es una reflexionada y provocativa llamada a la acción.